"No
me preocupa el grito de los violentos, de los corruptos, de los deshonestos, de
los “sin ética”. Lo que más me preocupa es el silencio de los buenos" Martin
Luther King.
¡Qué
frase profética para estos días de cuaresma en la Iglesia católica!. Los
violentos y asesinos están constatados en el diario vivir de nuestra Honduras,
en cada barrio, casa, comunidad, calle, cancha y mercado sabemos de muertes
violentas.
¿Cuántos
son los asesinos en el país? Se dice en los medios de comunicación que circulan
más de un millo y medio de armas, no sólo de calibre 22, esto no quiere decir
que son más de un millón de asesinos; sin embargo, sabemos que ya es un modo de
trabajar el “sicariato”: el dedicarse a asesinar por una paga monetaria.
Por esa
razón, para los que somos creyentes en Jesucristo, los que son hombres y
mujeres de buena voluntad, nos tenemos que cuestionar sobre lo que hemos
callado y dejado de hacer, cuando nos hacemos los desentendidos con esta
realidad donde el país entero está caído por el camino, cuando pareciera que la
esperanza en una sociedad de paz es lejana de esta sociedad.
Recientemente Jorge
Varela, quién fue por 25 años el dirigente del comité de Conservación y Desarrollo de la Flora y Fauna del
Golfo de Fonseca (Coddeffagolf), expresaba sobre la supuesta pasividad o
postramiento del pueblo hondureño, es como una advertencia ante tanta impunidad
y corrupción:
“…mucho
cuidado porque esta apatía puede ser una olla de presión que está comprimida y
de repente va explotar en contra de esta oligarquía y esos diputados que antes
eran de izquierda y ahora son de derecha, tienen carros nuevos y mansiones van
a tener problemas, están generando una revolución social, esa gente callada
silenciosa hay que tenerle mucho cuidado porque puede estallar”
“Siempre he
estado en contra de las revoluciones armadas, cuando los compañeros me decía
eso en la universidad siempre les respondía que la educación era el mejor
camino, pero ya no nos queda ni la educación, porque este gobierno nos ha
destruido hasta la educación. Lo que nos queda es irnos a las calles en
consulta pacífica, porque no podemos quedarnos callados ni seguir de revolucionarios
de teléfono, como muchos que hay por ahí. Tenemos que marchar por las calles,
liberales, nacionalistas, libres y todos los hondureños sin ningún distingo
político, porque este no es un atentado contra un partido, es un atentado de
unos cabrones que se han apropiado de la estructura del gobierno y nos están
jodiendo a todos los hondureños”.
Dejemos que
la Palabra y mandamientos del Pueblo de Israel ilumine, nuestro modo de vivir
en estos tiempos difíciles:
“El Señor dijo a Moisés: Habla en estos términos a toda la comunidad de Israel: Ustedes serán santos, porque yo, el Señor su Dios, soy santo.
Ustedes no robarán, no mentirán ni se engañarán unos a otros.
No jurarán en falso por mi Nombre, porque profanarían el nombre de su Dios. Yo soy el Señor.
No oprimirás a tu prójimo ni lo despojarás; y no retendrás hasta la mañana siguiente el salario del jornalero.
No insultarás a un ciego, sino que temerás a tu Dios. Yo soy el Señor.
No cometerás ninguna injusticia en los juicios. No favorecerás arbitrariamente al pobre ni te mostrarás complaciente con el rico: juzgarás a tu prójimo con justicia.
No difamarás a tus compatriotas, ni pondrás en peligro la vida de tu prójimo. Yo soy el señor.
No odiarás a tu hermano en tu corazón: deberás reprenderlo convenientemente, para no cargar con un pecado a causa de él.
No serás vengativo con tus compatriotas ni les guardarás rencor. Amarás a tu prójimo como a ti mismo. Yo soy el Señor” (Levítico 19,1-2.11-18).
Muy acertado lo que publicó, pero Fray digame Cristo nos manda a amar a estos como a mi mismo pero como amar a estos que nos dañan a diario nos han quitado todo y ya no tenemos nada mas que la esperanza de un futuro eutopico y caminar a ciegas sin rumbo, clamando que haya un cambio, angustia continua.
ResponderEliminarComo me dijo Fray Alfonso una vez los cambios se dan de abajo hacia arriba, cuando ese dia llegue de vardad que seremos libres.
Omar Pantoja
Ktquesis
Inmaculada Concepción
Hnduras
cuando guardamos silencio ante el dolor de los pequeños, es por miedo o por indiferencia?
ResponderEliminarel problema es la indiferencia... el amar no dice que no debe haber justicia.. el amor busca la justicia, no la venganza,